domingo, 12 de junio de 2011

Amelia Valcárcel y el feminismo hegemónico: idealismo ideológico sexista



Básicamente fue por replicar a esto por lo que Amelia Valcárcel (catedrática de Filosofía Moral y Política de la UNED, conferenciante e investigadora feminista de renombre y consejera de Estado, entre otras ocupaciones), me eliminó de entre sus contactos en facebook en marzo de 2011... Recuerdo ahora que ella había escrito en su muro un comentario en el que ponía: "El machismo mata, empobrece y atonta. Por este orden". Como se ve en el vídeo que he colgado arriba, la receta del feminismo es que la mujer ha de acceder al saber y, así, cambiará el mundo y favorecerá la consolidación de la democracia. Se ve en ello un IDEALISMO bastante ridículo... Vamos, que el machismo (no se explica de dónde surge el machismo) sería el responsable de la violencia en el mundo, pues "mata" (en primer lugar); ello provocaría pobreza (lo segundo); y para mantener su estatus de poder, especialmente frente a la mujer, a quien se perpetuaría en la desigualdad, los varones (que son identificados con el machismo) mantendrían a ésta alejada del saber atontándola (lo tercero). El camino de vuelta empezaría por lo visto adquiriendo las mujeres este saber que se les negaba. Se entiende que eso les daría poder a las mujeres, que accederían de esa manera a la igualdad; ello favorecería el desarrollo económico de los pueblos y, finalmente, la paz mundial. Demasié... 
Este esquema tan ridículamente IDEALISTA es, sin embargo, el esquema feminista vigente, y no sólo en boca de Amelia... Véase el informe de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer (Beijing -Pekín-, 1995) -pincha-. Pues bien. Imaginemos, por ejemplo, la sociedad afgana (Afganistán). Una sociedad violenta, en guerra constante. Una sociedad pobre. Una sociedad donde las mujeres están apartadas del poder y de la educación en un grado mayor aún que los propios varones. Una sociedad en la que, incluso, las mujeres llevan un burka para salir a la calle, invisibilizadas. Es el extremo de la falta de "empoderamiento" (el control del propio cuerpo y de la propia vida). Veamos... ¿Están diciendo Amelia y el feminismo que la solución a todo esto empieza por la educación de las mujeres y que los demás problemas se resolverán como consecuencia de eso? A eso se le llama IDEALISMO... Si Marx levantase la cabeza se moriría de nuevo... Esta vez, de risa... O de pena. Porque Marx sería lo que se quiera decir de él, pero algo sí que dejó muy claro: el idealismo es un pensamiento vacío e infantiloide... Verán: pretender asegurar la educación de las mujeres afganas sin haber resuelto antes los problemas de pobreza (por ahí encontraremos el origen del machismo) y de violencia guerrera constante es simplemente algo inviable por absurdo... Resulta incomprensible que Amelia, tan estudiosa de la Historia, se limite a repasar las IDEAS en la historia y pase por alto que es SÓLO CUANDO en Occidente hubo un desarrollo económico cuando, poco a poco, la burguesía accedió al poder político y se fueron consolidando los derechos civiles y políticos, primero, y los derechos sociales, económicos y culturales de los trabajadores, después. Y como consecuencia de todo ello, la paz social, bien que después de dos guerras mundiales. Esa paz que disfruta Occidente, junto a ese desarrollo del sistema económico (que ya no exige una alta reproducción a las mujeres, sino más bien su trabajo para la sociedad de consumo), son CONDICIONES NECESARIAS para comprender por qué las mujeres han accedido al trabajo fuera de casa en las ciudades occidentales, en las que nadie anda habitualmente por la calle con un Kalashnikov con el que resolver cualquier disputa (acerca de mujeres o de lo que sea), como ocurre en Afganistán, por la sencilla razón de que hay un Estado que tiene el monopolio de la violencia (sí, ya sé que hay países en los que la gente tiene derecho a ir armada, y así les va con los índices de violencia, pero ese es un problema cualitativa y cuantitativamente distinto)... Y es entonces, y sólo entonces, cuando las mujeres están en disposición de ver reconocidos sus derechos en condiciones de igualdad. Y por eso acceden de forma general a la educación superior en Occidente y, con ello, al empoderamiento personal y a los cargos de poder públicos: ese carro que las feministas pretenden poner delante de los bueyes...
El feminismo de Amelia propone empezar la casa por el tejado en el mundo en desarrollo, y es porque olvida la Historia y porque tiene un pensamiento vacío e infantil: idealista. Ese no será el camino que se recorrerá, de hecho, para la liberación de las mujeres (y de los varones) en el mundo por desarrollar. Será otro, claro. Mientras la ONU (y la OTAN...) tratan de poner oden (a menudo interesadamente) allí, las feministas puede que sigan con sus ensoñaciones idealistas, pues les permiten imaginarse como motor y causa (protagonistas) de los cambios, cuando no son (ni pueden ser) más que legitimadoras de los mismos. Su función legitimadora respecto a los cambios debería ser CRÍTICA y correctora (y así comenzó haciéndolo el feminismo en Occidente), pero la crítica ha sido abandonada y en su lugar sólo queda hoy un discurso IDEOLÓGICO (interesado) que ya ha alcanzado el grado, intolerable, del SEXISMO. Un idealismo ideológico sexista... Eso es el feminismo hegemónico de hoy. Y particularmente, en España (pincha).

Para ilustrar el grado de infantilismo idealista del feminismo hegemónico español instalado en el poder, vean las declaraciones del Delegado del Gobierno para la Violencia de Género cuando se le pregunta (minuto 10:06 del vídeo) sobre la venta de armas a Arabia Saudita bajo el mandato de la señora Chacón en el Ministerio de Defensa (pincha) y la relación que eso tiene con la desigualdad entre varones y mujeres en ese país. Miguel Lorente afirma: (...) "Son relaciones distintas. A mí se me escapan. Yo soy Delegado del Gobierno y llevo tres años en el Gobierno. Lo que sí es cierto es que son relaciones que están ahí pero que no son de consecuencia directa. Ni la desigualdad en Arabia Saudita existe porque España venda armas ni el dejar de vender armas va a significar que va a desaparecer." (...) 
Es propio de ignorantes no ver la relación entre la venta de armas a Arabia Saudita y la desigualdad entre hombres y mujeres. Porque es PRECISAMENTE LA GUERRA Y LA VIOLENCIA EL ORIGEN DE LA DESIGUALDAD entre varones y mujeres (menos para los idealistas, claro...). Sería mejor que el Gobierno del señor Lorente y la señora Chacón se dejara de vender armas a ese Estado y colaborase para que distribuyera su riqueza (que la tiene de sobra) de forma justa creando una clase media floreciente... Veríamos qué pronto desaparecerían las desigualdades entre varones y mujeres, cómo éstas se pondrían a trabajar de forma independiente y cómo disminuiría la violencia hacia las mujeres (esa violencia que Lorente se limita a explicar como consecuencia de una desigualdad... que imagina nacida de caprichos de espíritus malignos con pene). Hace falta ser idealista en grado infantiloide para asumir esta ideología que, por cargar al espíritu colectivo de los miembros de un sexo (un espíritu con sexo, es decir, el sexo del ángel maligno) con la responsabilidad de las desigualdades es, además, una ideología sexista.

Amelia Valcárcel dice en el minuto 3' 15'' de este vídeo (pincha) que "de nuestra especie, la parte a la que nosotros pertenecemos" lleva por aquí unos 100.000 años, y que "la especie en general" lleva casi 2 millones... Resulta que es nuestra especie la que tiene alrededor de 100.000 años, y lo que tiene unos 2 millones de años es el GÉNERO Homo... Se ve que de tanto usar el término "GÉNERO" en la acepción feminista pretenden APROPIÁRSELO hasta el punto de no utilizarlo en su sentido antropológico y de elegir el empleo de una terminología que vulnera los CONCEPTOS CIENTÍFICOS ESTABLECIDOS Y VIGENTES en la antropología o la paleontología. O es eso lo que le ocurre a la señora Valcárcel o habría que pensar que no sabe de lo que habla...  

Les dejo con un copia y pega de los mensajes privados que intercambié con Amelia Valcárcel en la red social facebook el 20 de mayo de 2011. Ustedes sacarán sus conclusiones.


Jose Manuel Arce García, 20 de mayo a las 19:27
Buenas tardes. He leído esto que ha escrito hace dos horas en un comentario dentro de una nota suya: 
"Amelia Valcarcel: El feminismo es la lucha de la mitad de la especie humana por su derecho al respeto y la libertad. A quien no le guste.. que lo explique." 
Me gustaría explicárselo, pero me temo que usted decidió en su momento que no quería tal cosa, y por eso prefirió eliminarme de sus contactos... Si es cierto, pese a todo, que le gustaría recibir esas explicaciones, estoy a su disposición y lo haré gustoso. Un saludo

Amelia Valcarcel, 20 de mayo a las 20:32 
Disculpe, pero creo que no tengo el gusto de conocerle..
Cuándo ocurrió eso que me dice?



Jose Manuel Arce García, 20 de mayo a las 20:57
Bueno, pues he mirado y... fue exactamente el 21 de marzo. Entré con anterioridad dos o tres días en su muro. El primero de ellos hube de borrar mis comentarios (a instancia suya) acerca del SAP respondiendo a otros anteriores que negaban su existencia. En la última ocasión que entré hice, seguramente, algún otro comentario que tampoco entraba dentro de lo que es admisible por parte del feminismo hegemónico hoy en España, aunque le confieso que no recuerdo de qué se trataba.
Lo cierto es que comprobar que me había borrado no me sorprendió demasiado, pero no por tratarse de usted, sino porque la negativa al debate público y abierto es una constante que, lamentablemente, he constatado desde que el feminismo no necesita debatir para imponer sus tesis... Eso es grave, creo... Y créame: si es grave para la democracia, lo es mucho más para el feminismo, que camina directo al abismo sin la brújula de la crítica...


Amelia Valcarcel, 20 de mayo a las 21:00 
Y, claro está, la brújula es de su propiedad...me equivoco?
Por cierto, sabe que esa bonita bandera que muestra... me la inventé yo? [se refiere a la bandera de Asturias que aparece en mi fotografía]


Jose Manuel Arce García 20, de mayo a las 21:09
No, por dios, no soy "el propietario" de esa brújula... Sólo soy, desde luego, uno de tantos portadores de ella... O si quiere hablar en términos de propiedades, uno de sus propietarios, ni más ni menos... Porque esa brújula nos pertenece a todos, ¿no? Reitero: no es sólo que se niegue la critica en perjuicio de la democracia... Es que el discurso feminista, así, se convertirá en una mole de dogmas... Es sabido que la crítica es la única manera de evitar eso. No comprendo por qué les parece una falta de respeto la crítica argumentada, cuando es el seguidismo aborregado el que no les pide un fundamento racional. 


Amelia Valcarcel, 20 de mayo a las 21:10 
Pero usted ha leído alguna vez algo de pensamiento feminista o conoce la historia de la teoría política feminista?


Jose Manuel Arce García, 20 de mayo a las 21:13
Sí, claro... Pero no es de historia de lo que yo quiero hablar, sino del presente... Más concretamente, del presente del feminismo en España


Amelia Valcarcel 20 de mayo a las 22:13 
O sea, que es como si me invita a que tratemos de la teoría de los sentimientos de Adam Smith, sólo que sin tener ni idea de quien sea Smith y por la buena razón de que usted siente cosas... No?

Jose Manuel Arce García 20 de mayo a las 22:16
ajajjaja... No, mujer, no soy tan patético como a usted quizá le gustaría...

Yo le invito a discutir acerca de la justicia. Y en particular, acerca de si el feminismo español es hoy justo o no lo es
Yo no "siento cosas". Yo tengo argumentos

Jose Manuel Arce García, 21 de mayo a las 1:20
...pero veo que usted no. Buenas noches.
 

Amelia Valcarcel, 21 de mayo a las 1:34
Querido señor
Lo que yo tengo es...más que hacer.
Si quiere debatir, dígame con que punto de alguna de mis obras quiere contrastar. Tiene donde elegir.
Para hablar por hablar...hágalo con quien quiera concederle su tiempo.
El mío ya ha sido suficiente.
 


Jose Manuel Arce García, 21 de mayo a las 2:01
Bueno, no pretendía plantearle objeciones concretas a alguna de sus obras, sino, como le he reiterado, debatir acerca del feminismo español de la actualidad, el que actúa en la política española y sobre el que supongo usted tiene alguna opinión, e incluso influencia. 
Si prefiere empezar por alguna objeción a un punto concreto de sus obras, le haré una: ¿puede explicarme en qué sentido es "utópico" el feminismo de Valerie Solanas? Así lo califica usted en 'Sexo y Filosofía. Sobre Mujer y Poder'. Le confieso que no comprendo que las atrocidades que vomita la autora de ese libro puedan ser "utópicas" en algún sentido... ¿Cuál es?


La conversación quedó ahí interrumpida. No hubo respuesta a esto (pincha y lee esa página y la siguiente). Es decir, pide en una nota explicaciones a quien no piense como ella, pero: no responde a preguntas sobre sus obras; no responde a preguntas sobre el feminismo español actual y la justicia; se queja de que tiene mucho que hacer para andar mensajeándose; dice no recordar que me borró de entre sus contactos en facebook... Pero no me agrega como contacto para que comente sus entradas o notas directamente y sin necesidad de mensajitos... Y ello pese a que en su perfil de facebook tiene miles de personas agregadas... (parece que hay una condición previa: ser una fiel ovejita aborregada que aplauda cada palabra de "su eminencia" y suscriba el pensamiento único).
 

6 comentarios:

  1. Por cierto, ya que pones el ejemplo de Afganistán. ¿Mayoritariamente, de qué género son los españoles que está arriesgando su vida para que en Afganistán la mujeres tengan derechos?
    Creo que es un tema que puedes desarrollar (lástima que la Sra. Valcárcel no quiera contrastarlo contigo)
    Saludos

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  2. Señor García, a mi sí que me gustaría saber cómo argumenta su contrariedad ante la afirmación de que "El feminismo es la lucha de la mitad de la especie humana por su derecho al respeto y la libertad". Muchas gracias

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  3. En primer lugar, le haré el favor de darme por aludido, pues muy bien podría no hacerlo, ya que se dirige usted a un tal "señor García" con el que no me identifico sino por pura cortesía hacia usted.
    Por lo que se refiere a lo que nos importa a usted y a mí, le contestaré brevemente, pues tiene usted el blog completo para comprobar lo que ahora le diré: el feminismo es una ideología que "en teoría" busca la igualdad entre varones y mujeres. Esa fue también la práctica política de muchas feministas. Sin embargo, hoy es minoritario y casi residual lo que algunos llaman feminismo de la "equidad" y que, para que quede claro de lo que hablo, busca la igualdad (no discriminación) entre varones y mujeres ANTE LA LEY. El feminismo hegemónico hoy, especialmente en España, es un feminismo muy distinto. Por supuesto, sigue hablando de la igualdad, pero se trata de una igualdad que llaman "real", una igualdad de oportunidades "real". Y para ese fin han establecido que está justificada la desigualdad ANTE LA LEY discriminando a los varones... Llaman a eso "discriminación positiva". Bien. No voy a negar que eso esté justificado en ocasiones, aunque habría mucho que discutir... Ahora bien, es completamente abusivo y un atropello intolerable que se haya IMPUESTO a la sociedad española una legislación dictada por ese feminismo (Ley contra la violencia de género de diciembre de 2004, Ley de divorcio de 2005, Ley de Igualdad de 2007) sin debate público y abierto de ninguna clase, IMPONIENDO por la vía de "la mayoría" la vulneración de DERECHOS FUNDAMENTALES de los varones, como ocurre de un modo INJUSTIFICABLE particularmente con la Ley Integral contra la Violencia de Género. Mire, esa ley no sólo ha sido inútil para el objetivo que dice marcarse, sino que es un atentado contra derechos humanos. Y además vulnera esos derechos de un modo innecesario... "El fin no justifica los medios". Más claro: el fin no puede justificar unos medios que son un atropello innecesario. Y ocurre que es el FEMINISMO, no el "hembrismo", como algunas personas prefieren decir, quien ha dictado y sostiene esa legislación (eso sí, sin dar la cara ante las críticas argumentadas...). El feminismo hegemónico español no puede ser otra cosa que FEMINISMO. Y por eso digo que no comparto que el "feminismo" sea, hoy por hoy, eso que usted cree que es. Decir que "es la lucha de la mitad de la especie humana por su derecho al respeto y la libertad" es OCULTAR que hoy atenta contra las libertades fundamentales de los varones y les falta al respeto más elemental. Le sugiero que piense en esto: los derechos humanos son derechos esencialmente INDIVIDUALES (no de una clase, raza o sexo). Mis derechos no permito que se vulneren en razón al sexo que tengo... Ni temporalmente ni de ninguna otra manera.

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  4. La igualdad "real" de la que habla el feminismo "de género" (como le suelen llamar) es en realidad una igualdad IMAGINARIA... Lo que es REAL, muy real, es la DESIGUALDAD ANTE LA LEY que ha impuesto.

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  5. El título de este blog es un claro termómetro de la "altura cultural y humana" de quien denosta de forma tan gratuita a Amelia Valcarcel.
    Ella ha mostrado claramente su inteligencia prescindiendo de alguien como usted.
    Salut!
    Carla Puig

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  6. 1. Lo que a usted le gustaría que fuera la realidad no es la realidad. Tampoco es usted quien ha de juzgar a los vivos y a los muertos. Desengáñese... ;).
    2. No existen "termómetros" de altura cultural y humana. Lo que existen son criterios racionales para hacer valoraciones. El nombre de alguien, su cara u otras cosas semejantes (como el título de un blog) son a menudo ridiculizadas por quienes no tienen argumentos para rebatir los que otros han expuesto. Esa clase de falacias son muy habituales (no es usted original). Usted ya ha dejado claro, además, que supedita los criterios racionales para hacer valoraciones a argumentos de 'supuesta' autoridad. Lo que constituye otra falacia.

    Amelia Valcárcel "ha demostrado claramente su inteligencia" a su juicio. No al mío. A mí me ha demostrado ser alguien prepotente, anidado a la vera del poder (tanto del PSOE como del feminismo español) y sin coraje para denunciar los excesos de quienes le dan cobijo. Cuando es evidente que el "feminismo real" debe ser sometido a crítica, una intelectual que no lo hace es simplemente alguien que abandona su puesto. Comprendo que lo hace así porque renuncia a su deber con la racionalidad crítica y en defensa de unos intereses determinados. Y eso se llama ideología. Ideología feminista. Saludos.

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