Los chavales creen que los niños son más tontos y traviesos que las niñas
Unos ensayos británicos sugieren que la diferencia de rendimiento entre sexos obedece a los mensajes que reciben
Los niños (en genérico) tienden a adaptarse a lo que oyen. Y, en
concreto, los chicos (varones) tienen asumido lo que se dice de ellos:
que son más torpes que las niñas. Una serie de ensayos realizados en
Reino Unido, y publicados en la revista Child development, pone de manifiesto que el mensaje cala en los críos desde pequeños, y que condiciona sus resultados escolares.
En uno de los trabajos realizados por Bonny Hartley, de la
Universidad de Kent, los investigadores preguntaron a 238 niños y niñas
de entre 4 y 10 años quién creía que era el protagonista de una
historia. Para ello, usaban una formulación neutra, the child, que sirve
tanto para críos como para crías. Las historias eran del tipo “the
child quiere aprovechar las clases” o “the child no saca buenas notas”, y
luego se les pedía que identificaran si las protagonizaba un niño o una
niña. El resultado era que lo masculino se asociaba a lo negativo, y lo
femenino a lo positivo.
Para saber por qué sucedía esto se hicieron dos otros dos
experimentos. En uno, con 162 niños y niñas, se los dividió en dos
grupos y se les pusieron unas pruebas. A uno de ellos se les dijo que
los chicos lo iban a hacer peor que las chicas. Y lo hicieron no solo
peor que sus compañeras, sino peor que los chicos del otro grupo, a los
que no se les había dicho nada. De alguna manera, su rendimiento
mostraba que habían interiorizado el mensaje.
Los varones asumen [sic, EL PAÍS debería decir "creen"] desde pequeños que su comportamiento es peor.
En el tercero de los ensayos se cogió otro grupo de 184 niños y
niñas, se los dividió en dos y a unos se les dijo que se esperaba que el
resultado fuera igual para ambos sexos. No fue exactamente así, pero
los chicos mejoraron respecto al grupo de control.
La conclusión apunta a que los pequeños, de alguna manera, adaptan su
comportamiento a lo que se espera de ellos. Y confirma otros estudios
que indican que esta es la causa, por ejemplo, de que los niños se
orienten más hacia carreras de ciencias y las niñas a las de letras.
También ofrece enseñanzas para el debate de la educación segregada.
“En muchos países, los niños van por detrás de las niñas en el colegio”,
ha dicho Hartley. “Estos estudios sugieren que los estereotipos
académicos negativos referentes a los niños se adquieren en los primeros
años de la educación infantil y tienen como consecuencia su
autocumplimiento. También sugieren que es posible mejorar el rendimiento
de los varones y así cerrar la grieta entre sexos mediante mensajes
igualitarios y superando la idea de hacer clases diferenciadas”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario